El dinamismo en las colocaciones de bonos podría disminuir en el mercado local, anticipando la volatilidad de los proceso electoral, de acuerdo con el director general de Moody’s México
El proceso electoral en México generará que las empresas disminuyan las emisiones de deuda durante el siguiente año, de acuerdo con el director General de Moody’s México, Carlos Díaz de la Garza.
“Estamos viendo que muchas empresas tratarán de refinanciar sus deudas (este año). Prevemos poca actividad en la emisión de deuda para el 2024. Las empresas van a tratar de abstenerse, de tener volatilidad con respecto al tipo de cambio y tasas de interés para el 2024″, dijo el estratega en el podcast de Norte Económico de Grupo Financiero Banorte.
Comparativamente, en 2018 año del último proceso electoral en el país, las emisiones de deuda de largo plazo disminuyeron 10%; mientras que las de corto plazo descendieron 22%, de acuerdo con datos de la Bolsa Mexicana de Valores.
En ese lapso, cuando el actual presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, resultó electo; la volatilidad incrementó tras la cancelación del Nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México. Además, en ese periodo apenas comenzaba operaciones el segundo centro accionario local, la Bolsa Institucional de Valores (BIVA).
Algunas áreas de análisis han comenzado a emitir proyecciones al respecto de lo que será el 2024. Commerzbak, el cuarto banco más grande en Alemania, dijo que el peso mexicano resentirá la volatilidad por el proceso electoral.
Al cierre de julio, la Bolsa Mexicana de Valores mostró un repunte de 123% en las colocaciones de deuda de largo plazo que totalizaron en MXN$187.899 millones desde $84.336 millones reportados en el mismo periodo de 2022.
Además, las empresas han comenzado a realizar refinanciamientos, amortizaciones y pagos de bonos adelantados también aprovechando beneficios del mercado como la apreciación del peso mexicano que permitió, por ejemplo, que Televisa llevara a cabo una oferta pública de adquisición de un bono en dólares.
La televisora mexicana informó también que su oferta cascada será igual a US$207,42 millones mismas que serán pagadas y canceladas el 10 de agosto. Se trata de cuatro bonos con vencimiento en 2045 a una tasa de 5%, 2049 a 5.25%, a 2025 con un interés de 6,625% y 2046 a 6,125%.
La emisora explicó que, quienes hayan ofrecido las notas antes o en la fecha límite serán elegibles para recibir una contraprestación que incluye una prima de US$30 por cada US$1.000 de principal.
Esta semana, también se dio a conocer que Genomma Lab, comercializador de productos de cuidado de la salud, realizó la amortización anticipada y voluntaria del segundo tramo de un préstamo garantizado de MXN$272,2 millones, mismo que fue utilizado para financiar su planta de manufactura en México para productos farmacéuticos.
“Están buscando hacer todos estos refinanciamientos y reestructuraciones de deuda o reestructuración de pasivos en el 2023″, dijo el estratega de Moody’s en el podcast de Banorte.
Las emisiones de corto plazo en el centro accionario mexicano también continúan en aumento. En julio, las colocaciones incrementaron 39% a MXN$130.729 millones desde los MXN$94.120 millones reportados el mismo lapso del año pasado.
Otros activos de financiamiento como los Cerpis y CKDS también continúan aumentando. De acuerdo con el senior advisor en México para Alpíne Capitals Advisor, Arturo Hanono, en los primeros seis meses del año, se colocaron 52 certificados bursátiles fiduciarios de proyectos de inversión, mejor conocidos como Cerpis y un Certificado de Capital de Desarrolo (CKD), entre BIVA y BMV.
“El número de CERPIs ha crecido exponencialmente por la especialización que están teniendo las inversiones en cuanto al riesgo y vida que permiten asignarlos en una de las 10 SIEFORE”, escribió.
Los Cerpis son vehículos que les permiten a los inversionistas institucionales participar en capital privado e invertir en México, dijo Hanono a Bloomberg Línea.
Por su parte, el estratega de Moody’s refiere que México se ve beneficiado por las expectativas del nearshoting y la cercanía que presenta con EE.UU.. Incluso las emisiones de deuda local se agregan a los factores que llevaron a la calificadora a mejorar su pronóstico de crecimiento en el Producto Interno Bruto para el país a 2,4% desde 1,7%.