🔸 El pavimento mojado hizo que la pesada unidad no pudiera frenar llevándose todo a su paso

#CDMX | Una vez más, la temida “bajada del diablo” hizo de las suyas… Esta vez, la víctima fue un camión repartidor de refrescos Jarritos que acabó causando un desastre urbano de proporciones épicas.

Todo ocurrió la noche del pasado miércoles 26 de noviembre, cuando el conductor de la unidad perdió el control al bajar por la calle Paso Florentino, en la colonia Ampliación La Mexicana, alcaldía Álvaro Obregón. ¿El resultado? Un boquete en una casa, postes derribados, estructuras dañadas, una camioneta golpeada que estaba estacionada y cientos de botellas explotadas como fuegos artificiales.

Según testigos, la pendiente mojada y la falta de control provocaron que el camión se deslizara sin frenos, mientras los vecinos solo podían mirar el espectáculo en cámara lenta.

En un video que circula en redes sociales, se observa cómo el vehículo se lleva todo a su paso, incluido el muro de una vivienda, hasta terminar estampado contra la banqueta. La escena parece sacada de una película… o de un mal sueño de quien no aseguró su casa.

Al lugar llegaron elementos de la policía y Protección Civil. El alcalde Javier López Casarín detalló: “Se brindó apoyo a tres personas, de 85, 78 y 35 años. Además de un hombre de 25 años, policontundido“, informó.

Aunque la vivienda quedó con un hoyo decorativo cortesía de Jarritos, Protección Civil determinó que la estructura de dos niveles no estaba comprometida, así que nadie fue desalojado.

La famosa ‘bajada del diablo’ ya tiene historial. Vecinos también la llaman “la montaña rusa”, y no por diversión: constantemente se registran accidentes, con piso seco o mojado. Pero ni eso ha logrado que las autoridades actúen para rediseñar o asegurar el tramo.

Para colmo, este no es el primer evento que involucra a un camión de Jarritos. En septiembre, otro fue “tragado” por un socavón en Iztapalapa. ¿Coincidencia o maldición contra la marca refresquera?